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Hay comercios en Trenque Lauquen a los cuales no hace falta describir ya que son conocidos por todos los habitantes de la ciudad desde hace mucho tiempo. Y la panadería “La Universal” es uno de ellos. No sólo se trata de un negocio tradicional que lleva varias décadas trabajando, sino que su servicio es sumamente reconocido por la calidad de los productos que ofrece a nivel local y que muchas veces también son adquiridos por ocasionales visitantes que suelen comprar elaboraciones que no encuentran en sus ciudades de origen.
Aníbal Lancuba, quien recordó detalles de la historia de la panadería, analizó el movimiento económico actual y contó cómo se imagina el futuro del comercio que hoy atiende junto a miembros de su familia. “…Nuestra panadería nació el 15 de diciembre de 1946. Mi abuelo se instaló en calle 9 de Julio 15, él ya venía de trabajar en ‘La Favorita’ (ubicada en Avellaneda y Oro) donde también trabajó mi bisabuelo llegado de España. Le habían dicho que en Trenque Lauquen había oportunidades y él se instaló en esa esquina. Luego, mi abuelo se independizó de él y se fue a 9 de Julio 15 donde se inició ‘La Universal’…”, rememoró.
También recordó que “…anteriormente en ese lugar había otro panadero a quien mi abuelo le compró la panadería y se instaló ahí junto a mi abuela. Tuvieron cinco hijos, entre ellos mi vieja, Ana Nelly Andrade, quien fue la que se quedó con la panadería y nosotros nos criamos ahí adentro. Yo soy la cuarta generación, ahora tengo a mis hijos que también trabajan conmigo y que quizás sean la quinta generación. Siempre fue un trabajo familiar, tanto mi abuelo y mi abuela trabajaron con los hijos, después mi vieja trabajó con mi papá, también mis hermanos, aunque ellos luego se dedicaron a otra cosa y el único que quedé fui yo. Ahora está mi señora, María Florencia, y mis dos hijos que colaboran con la panadería…”, dijo antes de agregar: “…Nosotros hoy no estamos en la calle 9 de Julio porque la alquilamos, y nos fuimos a Pte. Uriburu y Alsina. Todo arrancó en Oro y Avellaneda, siguió por 9 de Julio y luego nosotros nos vinimos para este lado donde el 2 de noviembre próximo vamos a cumplir 30 años. Vamos conociendo la ciudad y brindando oportunidades a todos los hogares de Trenque Lauquen…”.
Respecto de cómo es la tarea diaria de un panadero, el entrevistado comentó: “…A este trabajo lo mamé de muy chiquito y tuve la oportunidad de irme a estudiar afuera, pero me dieron más ganas de quedarme a trabajar en la panadería que hacer una carrera. Mis hermanos sí estudiaron. Es un trabajo arduo por el tema del horario que se cumple dentro de la panadería que es desde las 4 de la mañana cuando hay que levantarse, empezar a elaborar y cocinar y adelantarse siempre a los horarios de la gente que a las 7 u 8 se levanta para desayunar y empezar su tarea diaria. A esa hora nosotros ya tenemos que tener el servicio de brindar las facturas, el pan o cualquier otra demanda…”.
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